El levantamiento popular de los pueblos árabes iniciado en Tunez y en Egipto, se extiende a Yemen, Marruecos, Barheim, Jordania, Argelia y Libia. En este último país la situación es sumamente preocupante, la represión gubernamental habría ocasionado ya decenas de muertos y cientos de heridos, los enfrentamientos entre opositores y leales al gobierno de Gadaffi son cada hora que pasa más violentos y se teme un baño de sangre, en medio de informaciones no confirmadas de crecientes deserciones de funcionarios del régimen.
Aunque en cada país las situaciones son diferentes y las protestas hunden sus raíces en causas diversas, un hilo común une la ira acumulada: el rechazo a regímenes que vienen aplicando contra sus pueblos políticas de hambre y de represión, mientras las minorías gobernantes viven en la opulencia.
Los acontecimientos se suceden con intensa aceleración y no es posible preveer todas sus consecuencias y objetivos finales a lograr. Pero la información es suficiente para elevar una voz firme y solidaria, que exija a los gobiernos el fin inmediato de toda violencia represiva contra los pueblos.
Desde el Frente Amplio nos solidarizamos con las luchas de los pueblos árabes por la justicia social y la libertad. No cabe duda que un cambio progresista y popular en el mundo árabe, que garantice mejores condiciones de vida, de trabajo y de participación democrática a los pueblos, y políticas soberanas desde los nuevos gobiernos para construir un nuevo mapa de independencia, cooperación y paz en la región más explosiva del planeta, tendrá una repercusión positiva y favorable en todo el mundo para todas las fuerzas de progreso que estamos en lucha contra las políticas hegemónicas y de guerra del imperialismo, contra el terrorismo, contra la corrupción y contra las políticas neoliberales.
La lucha internacional por otro mundo posible de paz, justicia y libertad, se juega hoy una baza trascendental en el mundo árabe. Son muchos los intereses en juego que llevaron a las tragedias de Irak y de Afganistán, que mantienen en condiciones infrahumanas al pueblo palestino, y al respaldo de Occidente a las monarquías petroleras y a los regímenes autoritarios y corruptos.
¡Solidaridad con la justa y heroica lucha de los pueblos árabes!¡ Alto a la represión! ¡Respeto a la independenca y la autodeterminación sin injerencia de las grandes potencias neocoloniales!
San José, Costa Rica, 21 de de febrero de 2011
Partido Frente Amplio
Comité Ejecutivo Nacional
