En los próximos días se cumplirán 2 años del terremoto de Nicoya ocurrido el 5 de septiembre de 2012, desde esa mañana de septiembre Puntarenas vive una emergencia que pone en riesgo la vida de cientos de personas que acuden al Hospital Monseñor Sanabria ya sea por atención, o porque ahí laboran. Este centro médico regional, que atiende a más de 400.000 personas, vio limitada su capacidad y se ha mantenido en condiciones precarias debido a los graves daños sufridos por el sismo. Antes del terremoto, la planta física del hospital Monseñor Sanabria ya venía presentando problemas estructurales
“Si bien, se paralizaron cirugías, trasladaron servicios a otras zonas y se instalaron camas en bodegas, para finalmente quedar con un Hospital al mejor estilo de zona de desastre, esto no fue suficiente motivo para que la entonces presidenta de la República Laura Chinchilla, declarara la situación como emergencia nacional. No entendemos cómo no se declaró la emergencia, siendo éste un caso gravísimo que atenta contra la salud de cientos de miles de habitantes”, dijo el legislador Carlos Hernández Alvarez.
El 8 de enero del presente año la expresidenta de la República Laura Chinchilla hizo entrega de los terrenos donde se construiría el nuevo hospital. “Han pasado casi ocho meses desde ese acto y aún seguimos esperando el inicio de las obras, creemos necesario recalcar que es de suma relevancia que el lugar que se escoja para la construcción del nuevo hospital reuna todos los requerimientos y cumpla con todas las normas que así establecen las leyes de nuestro País, para tratar de evitar experiencias como las del terreno adquirido por la CCSS en Cartago donde no se puede construir. A la fecha no conocemos los estudios técnicos ni la viabilidad del terreno en que la señora Chinchilla anunció la construcción, por otra parte no sabemos el costo real de la obra ni el monto que se tendrá que financiar”, dijo Hernández.
El legislador recordó que este tipo de proyectos conlleva una serie de logísticas que consumen mucho tiempo, desde los permisos de las autoridades correspondientes (SETENA, AyA, etc) que velan porque todo sea haga conforme a la ley, pasando además por la elaboración de los planos constructivos, las consultorías correspondientes y hasta el mismo proceso de licitación para llevar a cabo la magna obra. “Por estas razones que hemos considerado necesario que el gobierno de la República declare como emergencia nacional la construcción del nuevo hospital de Puntarenas, un proyecto que es de vital importancia, no sólo para los habitantes del Cantón Central de la provincia, sino para los cantones vecinos y el área que se circunscribe al Pacífico Central y parte de Pacífico Norte de nuestro país” declaró.
Según Hernández, con la declaración de emergencia se podrían aligerar algunos de los trámites para la construcción del nuevo hospital, además, destacó la necesidad de que las fuerzas vivas de la provincia trabajen en conjunto. “Unamos esfuerzos y cerremos filas para que las autoridades competentes asuman la responsabilidad real de declarar como prioridad de este gobierno la construcción de un nuevo hospital de Puntarenas”, enfatizó el frenteamplista.
Hernández resaltó la labor encomiable de las y los trabajadores que con ahínco y esfuerzo han dado lo mejor de sí para salir adelante después de las lamentables condiciones en las que quedó el Monseñor Sanabria. “Cada día se enfrentan a la escasez de cuartos, de camas, al ruido incesante producto de la demolición de la planta física, y sin embrago, llevan a cabo día a día una labor digna de aplaudir y que se gana el respeto de toda la comunidad”.