- Decreto disminuiría vida útil de unidades, obligaría a pintar de amarillo todas las unidades y supeditaría permiso para transporte de trabajadores ha visto bueno de empresas de autobuses que hagan la misma ruta.
El diputado frenteamplista Francisco Camacho apoya al gremio de buseteros en su lucha contra un decreto aprobado por el Consejo de Transporte Público (CTP) que perjudica enormemente a los pequeños y medianos transportistas y por ello solicita que no sea firmado por el presidente de la República, Luis Guillermo Solís.
Jesús Campos, presidente de la Asociación Nacional de Transportistas (Anatrans), denunció que dicho decreto pretende cambiarles las reglas con las que han trabajado durante años, provocando la extinción de los pequeños transportistas de estudiantes y trabajadores, que suman unas 14 mil unidades, todo en beneficio de los grandes autobuseros.
El decreto incluiría, entre otras cosas, la disminución de la antigüedad (vida útil) permitida de las microbuses de 20 a 15 años y cobraría una garantía de cumplimiento por un monto igual al salario base de un oficinista 1 del Servicio Civil (282 mil colones al día de hoy), el cual se exigiría para dar el respectivo permiso. Además, restringe abusivamente el permiso de ‘especiales’, que permite al prestatario del servicio dedicarse a otra actividad con su buseta en momentos de inactividad. En caso del transporte a trabajadores de alguna empresa, si se aprueba el decreto los buseteros deberían pedirle permiso a las empresas concesionarias de buses de la ruta donde operan para poder hacer el servicio privado. Finalmente, el documento obliga a los buseteros a pintar todas las unidades de amarillo Caterpillar, lo que significa una erogación de mucho dinero.
Para el diputado Camacho, el CTP se autogobierna en temas de transporte público en este país, y eso es lo que tiene a muchas comunidades pagando tarifas exorbitantes en buses. “Por el pésimo servicio que han brindado las empresas autobuseras durante años, es que ahora pretenden desaparecer a los pequeños y microempresarios de busetas, y que sean los concesionarios los que asuman esa responsabilidad de transportar estudiantes y trabajadores. Es una vergüenza, es un descaro y estamos llegando al límite. Se están dando atrocidades en los órganos de desconcentración máxima del MOPT”, indicó Camacho.
El decreto ya fue aprobado por la junta directiva del CTP; no obstante, el gremio de los buseteros le pide al presidente Solís que no lo firme, o de lo contrario se verán obligados a tomar medidas de presión.