Desde la Secretaría de Comunicación del Frente Amplio les presentamos una entrevista a profundidad con el precandidato Frank Camacho. Abordamos temas como desarrollo partidario, relación con las estructuras partidarias y con el resto de la sociedad, así como motivaciones personales para enfrentar junto a nuestro partido el camino a las Elecciones Nacionales 2018. Esperamos que esta conversación le sirva como un insumo importante, no sólo para apoyar el precandidato de su predilección, sino para entender un poco más el pensamiento de nuestro Partido, nuestros puntos de congruencia y nuestras diversidades.
¿Por qué ser candidato? ¿Por qué usted y por qué en este contexto?
Bueno, creo que hay muchas cosas que decir políticamente hablando. En la coyuntura actual del país nosotros tenemos definitivamente que levantar la voz. Esto se ha convertido en una verdadera lucha de clases. Nosotros no podemos permitir que Liberación ni la Unidad vuelvan a tomar el poder en este país. Este país necesita por lo menos 4 años más sin Liberación Nacional y sin el PUSC, o sea sin el bipartidismo, que fácilmente se ponen de acuerdo en el control de las instituciones que quedan aun generándole una paz social a este país. Yo creo que de alguna manera las intenciones son muy claras, venir a terminar de hacer el trabajo inconcluso que las fuerzas populares no han permitido que ellos hagan.
Vos recordarás que el gobierno de Arias inició la arremetida neoliberal continuada por el gobierno de José María Figueres. El gobierno de Jose María Figueres fue un despilfarro de plata. Acordémonos de los Programas de Ajuste Estructural y todo el cierre del Banco Anglo, el cierre del INCOFER. De una continuidad, una continuación de lo que inició de alguna manera Oscar Arias habiendo sido él (Figueres) Ministro de Oscar Arias en su gobierno. Eso por supuesto que de alguna manera nos obliga a tener o a levantar una voz a favor de la gente, a favor de las instituciones que nos quedan, a favor de llamar la atención a los costarricenses y a las costarricenses del peligro inminente que significaría un Liberación de nuevo en el poder. A pesar de que en la campaña que están desarrollando uno de los bandos quiere arrobarse inclusive las banderas progresistas y decir que ahora más bien están volviendo a la izquierda.
Yo creo que esos son cantos de sirena y simples discursos de campaña que en la realidad no son ciertos, o sea, las intenciones que tienen son absolutamente diferentes. El que Antonio Alvarez Desanti esté siendo respaldado por Oscar Arias queda absolutamente evidenciado cual es el plan. Es la extrema derecha definitivamente la que está apoyando esa candidatura. Y una derecha, podría decirse un poquito más moderada, apoya a Figueres pero igualmente sigue siendo derecha con intenciones de venir a terminar de repartirse lo que queda de este país, de las instituciones. Para nadie es un secreto que el ICE sigue siendo un gran negocio, para nadie es un secreto que todavía hay hambre en cuanto al tema de infraestructura. Hay mucha plata ahí y por supuesto que quieren venir a meter las manos en el erario público otra vez. Situación que no han podido hacer de manera continua con este Gobierno que se les atravesó en el camino. Entonces me parece que por un asunto de mensaje principalmente creo que es importante dar ese paso adelante.
¿Y usted? ¿Lo personal de decir por qué yo me voy a meter en esto?
Yo soy como una especie de híbrido, yo soy una persona formada en la calle acostumbrada a llevar palo. Vengo desde muy abajo de la sociedad costarricense. Cuando te imaginás de lo abajo que puedo venir, seguí más para abajo para que podás más o menos ponerme en contexto. El sector cultural a mí como persona me ayudó mucho, me ha formado, pero también he incursionado en el sector empresarial. Puedo decir que conozco de alguna manera los dos sectores, conozco los dos lados de la moneda. Para venirme un poco a lo contemporáneo, cuando dimos la gran lucha contra el TLC, yo no di la lucha desde un sindicato, yo no di la lucha desde un puesto público. Yo di la lucha desde mi propio peculio, desde mis posibilidades, disponiendo recursos propios, moviendo gente, moviendo equipo. Comprometido realmente con esa causa en contra de ese TLC porque conocía desde adentro a las transnacionales como mucha gente. En este partido no las conocen. Yo he estado en las entrañas mismas de las transnacionales y sé cómo funcionan, se cómo operan, se cómo explotan al trabajador, se cómo explotan a los que les prestamos servicios. Por supuesto que sabiendo esto, sin que nadie me lo tenga que venir a contar, inmediatamente tomamos partido en contra de ese TLC. Pero son luchas que venimos dando desde antes, desde muy atrás. Conscientes de las conquistas sociales de este país que son realmente patrimonio de los costarricenses y que tenemos que defenderlas. Entonces eso me motiva, yo creo que teniendo esa experiencia es que creemos que podemos aportar. Soy una persona que toma decisiones, soy una persona que le gusta escuchar, le gusta ser propositivo, generar ideas y apoyar las buenas ideas. Y creo que este país necesita progresar.
Desde ese aporte de la creación de ideas, de ser propositivo. Cuéntenos un poco cuales han sido sus aportes específicos desde esta realidad que le ha tocado vivir en estos últimos tres años como diputado. ¿Qué aportes específicos ha dado que llevan su firma, su sudor?
Primero, absolutamente fieles al trabajo emprendido por José Merino y Jose María Villalta. Hemos defendido sus proyectos. Las iniciativas que ellos dejaron en esta Asamblea Legislativa las hemos seguido respaldando y además hemos aportado nuevos proyectos. No es para nada extraño que hayamos logrado aprobar una Ley de la República que es lo que tiene que ver con la ampliación de la carretera San José-Cartago que es un anhelo de los cartagos desde hace cuarenta años y que ahora logramos poner los puntos en las íes con una ley. No es porque yo lo haya propuesto pero cuando vos me decís bueno qué has hecho, qué has aportado, no es cualquier diputado que puede decir tengo una ley aprobada aquí en el Congreso de la República. Es difícil, es complicado. Hay muchos intereses. Empezando por algunas instituciones que están tomadas, como por ejemplo el MOPT, que es una institución contra la que hemos venido martillando. Criticando el manejo del CTP, el autogobierno que ahí existe, la independencia jurídica del CONAVI, por ejemplo. El manejo irregular del COSEVI, la inoperatividad del Consejo Nacional de Concesiones, las sinvergüenzadas del CETAC ahí en Aviación Civil y que hemos venido martillando sobre esto. Pues no es nada fácil lograr aprobar, tomando en cuenta estas adversidades, un proyecto de ley de infraestructura tan importante.
Un proyecto de ley que viene a resolver el problema vial de la GAM porque también me correspondió la discusión y la dictaminación del proyecto San José-San Ramón y gracias a esto aprendimos muy rápido. Puedo decir que tengo esa virtud de que aprendo muy rápido. Siendo una persona que no había puesto nunca los pies en la Asamblea Legislativa, capitalizar ese proyecto para convertirlo en un proyecto San José-Cartago y lograrlo hoy Ley de la República, me parece que muestra algo de la capacidad negociadora que tenemos. De la capacidad de diálogo, de la capacidad de propuesta, de la capacidad de ideas que podemos aportar.
Hemos estado muy de cerca también con temas que tienen que ver con el empleo, con la explotación, con la usura, con el salario mínimo vital. Que son proyectos que vienen desde otras administraciones presentadas por iniciativa del Frente Amplio pero que hemos apoyado y por los que hemos puesto la cara y hemos defendido. Hace unos días que hablaba con el Ministerio de la Presidencia yo les decía. ¿Por qué si ustedes insisten tanto en este proyecto de empleo público también no piensan en darles una oportunidad a los trabajadores del sector privado? Que hoy están siendo absolutamente explotados en las plantaciones de monocultivos, por ejemplo, y para nadie es un secreto que con un salario mínimo vital adecuado, más acorde a la realidad y a las necesidades que las familias tienen. Bueno, eso no sonó mal y obviamente no pensando en dar el apoyo a un proyecto de empleo público al cual hemos dicho que estamos rotundamente opuestos por lo que esto significa, pero también logramos de alguna manera hacer que resonara la necesidad que tiene el sector privado, principalmente los que menos ganan para que logre entrar en la corriente legislativa esta sensibilización con respecto a estos sectores.
Hemos sido responsables con la fracción, hemos sido muy respetuosos con la jefatura de fracción, hemos sido disciplinados aquí en la Asamblea Legislativa. Creo que soy de los diputados que menos ha faltado al plenario legislativo y eso es constancia en una institución que es tan fácil de autogobernarse como diputado y uno decir bueno, vea, voy a dedicarme a otros intereses antes de la responsabilidad que la gente nos dio. Yo creo que si algo hemos aportado es disciplina, constancia, responsabilidad y compromiso.
Cuando llegó acá venía con una valija de sueños, de cosas que quería impulsar. Han sido 3 años muy duros y este año que viene es de los años más duros, de trabamiento sobre todo del Primer Poder la República. ¿De esos sueños que traía en la maleta, qué le queda que hubiera deseado dejarlo como legado y que va a estar complejo en este año que viene?
Frustraciones no son, es la sensación de impotencia. Son diferentes corrientes políticas, muchos intereses, muchos manejos, muchas malas intenciones. Con todo hay que jugar, hay que saber conocer y reconocer cuál es el juego político del epicentro político de Costa Rica que es la Asamblea Legislativa. Por aquí pasa absolutamente todo lo que tiene que ver con la calidad de vida de los costarricenses porque por aquí pasa la educación, la salud, la cultura, la infraestructura, lo económico, lo político, lo ambiental, lo diverso. Aquí está todo. Entonces cuando uno viene a la Asamblea Legislativa lleno de expectativas es exactamente como toparse un muro y lo que iniciás es exactamente la forma de empezar a escalar ese muro. Si vos sos escalador, o sea que traés experiencia política, tal vez se te haga más fácil escalarlo. Pero el muro es tan alto que puede ser que lo estés escalando hacia la derecha o hacia la izquierda sin lograr subir. Y aquí lo que hay que proponerse es tratar de subir. Y el lograr ir subiendo ese muro es la experiencia que podás ir obteniendo en el camino. Y entonces vas dando pasito a pasito y por ahí enganchás una mano y poquito a poco. O sea yo calculo que no vamos llegando ni a la mitad del muro y ya se nos está acabando el periodo. Entonces te vas quedando sin fuerzas como escalador pero tenemos que sacar fuerzas de alguna parte porque a final de cuentas no deja de ser un asunto competitivo y si estás en eso tenés que llegar hasta el final. Es como el que se mete a correr una maratón o cualquier competencia. A veces lo importante tal vez no es ganar pero por lo menos llegar con la medalla a la casa. Y yo creo que el hacer una gestión limpia no deja de ser importante porque eso le demuestra al pueblo costarricense que las cosas se pueden hacer honestamente. Que se pueden hacer de manera transparente. Cuando yo venía para la Asamblea Legislativa me preguntaron alguna vez ¿A usted qué le gustaría dejar en la Asamblea Legislativa? Bueno, a mí me gustaría dejar una huella de honestidad, de transparencia, de honradez. Y que si voy a entrar limpio quiero salir limpio de la Asamblea Legislativa. Yo creo que eso es muy importante porque el pueblo costarricense está harto de los políticos que se aprovechan de la confianza que se les da de llegar a una curul en la Asamblea Legislativa y agarrarla, pisotearla, romperla, dejarla hecha pedazos e irse sacudiéndose las manos campantemente como si nada hubiera pasado. Yo creo que esto es un asunto de responsabilidad. Hay mucha impotencia, pero creo que lo hemos hecho, lo poquito que hemos hecho, lo hemos hecho con mucha honestidad y eso de una manera convence.
Su visión de cómo ha sido el proceso de construcción de estructuras de base, de estructuras cantonales, de las provinciales. ¿Cómo ha visto ese proceso?
Esto es un partido joven, un partido nuevo. Este es un partido que más bien ha crecido demasiado rápido. Esto es como un niño que le empiecen a dar esteroides. Rápido tiene un gran cuerpo pero hay que desarrollar el intelecto. Hay que desarrollar la parte anímica. Hay que desarrollar la parte psicomotora, en el caso de un partido la parte psicosocial. Por supuesto que es tomando en cuenta este rápido crecimiento, la reestructuración que es como yo lo denomino, la reestructuración del partido pues es difícil. Estamos hablando de personas que vienen de muy diferentes corrientes sociales, de Costa Rica. Gente que ha visto en este partido la posibilidad de aportarle al país pero desde sus visiones, sin adoctrinamientos, sin que medie en el centro gamonales o dueños del partido, con liderazgos que están creciendo y se están tratando de alguna manera de consolidar. A pesar de eso creo que el partido va demostrando una gran madurez. Nosotros, por ejemplo Cartago, ya es una provincia que está lista a nivel de renovación de estructuras y puedo decir que no nos costó tanto. Pero el problema no es que cueste o no cueste porque si estamos intentando algo nuevo pues obviamente nadie sabe cómo se hace. Nadie tiene en este partido la receta de cuál es el FA que queremos. La estamos construyendo. Y yo creo que sobre eso estamos. Mucho que discutir, mucho que decir, mucho en lo que nos tenemos que sincerar como militantes del partido. Y yo creo que en eso estamos en este momento. Lo más importante es que conforme pasan los días y conforme se dan los procesos, el partido se va consolidando más, a pesar de ser un partido joven y que tiene mucho que aportarle a este país.
En usted hay un liderazgo que le ha hecho llegar a una curul. Que es un liderazgo provincial. Es un liderazgo de trabajo constante en el desarrollo político-partidario en la provincia, pero esta coyuntura plantea un salto. ¿Cómo pasar de ese liderazgo provincial a un liderazgo nacional? ¿Qué necesita dentro de su construcción como líder para pasar de lo provincial a lo nacional?
Eso es natural en el FA. El FA exactamente lo ha hecho así. El FA empezó siendo un partido provincial con un liderazgo muy importante como el de José Merino. Y una experiencia muy importante como la de José logró llevar a una persona desconocida a una curul en San José como Jose María Villalta, que tuvo una coyuntura diferente a la que tuvimos porque él estuvo sólo contra un partido liberacionista con sendos problemas de corrupción como la trocha para contar uno, que le dio una exposición mediática importante, que se supo capitalizar esa exposición mediática y que le dio la posibilidad de ser candidato a la presidencia y que te voy a decir es a quien queríamos de candidato en esta también elección. Sin embargo, se abren nuevas posibilidades y nuevos retos y lo que tenemos en frente es un reto. Edgardo, por ejemplo, es muy conocido en el sector ambiental pero hay otro montón de sectores que no lo conocen. O sea, también tiene el reto de exponerse a la ciudadanía con sus ideas y sus propuestas para ser conocido y reconocido. Yo creo que a como hemos ido creciendo poquito a poco con un liderazgo distrital, pasamos a una especie de liderazgo cantonal, porque también fui regidor en la municipalidad. Fui candidato a alcalde y perdí contra toda la maquinaria de liberación por 37 votos ganando 3 distritos de 4. Pasamos a un liderazgo provincial inesperado porque nadie decía que el FA iba a sacar 9 diputados. Cuando yo entro al FA, no estaban ni en las encuestas ni aparecían en el 1% y no entré para ser diputado. Entré para aportar, para hacer parte del equipo, para hacer crecer el partido. Para aportar un granito de arena en una idea en la que muchos estábamos confluyendo. Bueno, se da una situación similar. Se abre la posibilidad de presentar una precandidatura porque precisamente quedan espacios todavía sin llenar. ¿Qué es lo que pasa? Cuando Edgardo aparece como el candidato o precandidato no se logra amalgamar el partido en su totalidad. O sea, el partido no sale y cierra filas alrededor de Edgardo y dice está el candidato cero. No, algo faltaba más. Ahí es cuando comenzamos a analizar un grupo de compañeros y compañeras de diferentes provincias de que faltaba algo más. O sea que lo que se podía generar más bien era una especie de división porque algunos estaban considerando que se les estaba imponiendo una candidatura. Entonces dijimos, aquí lo que hay que hacer para que todo mundo se sienta parte es tengamos dos precandidaturas y que se escoja. Y la que sea luche por terminar de amalgamar ese partido porque ya existió la oportunidad de tener otro candidato. Ya no es el que está diciendo un grupo que va a ser sino que hay otro que está saliendo por iniciativa propia y por consejo de algunos grupos que también va a apostar. Y queda clarísimo que no es ni por venir a atravesarle el caballo a Edgardo ni por venir a atravesarle el caballo a ninguna intención sino simplemente pensando en la unidad del partido. De que quien salga fortalecido, porque así lo ha dicho, de esta contienda va con la obligación de apoyar al otro para poder cerrar filas.
¿Cuáles son 3 líneas de acción en un posible plan de gobierno?
Voy a decir 4, concretas. En lo que tenemos que incidir en este país para poder gobernar y para poder generarle bienestar a la gente. Aquí hay 2 instituciones fundamentales y 2 ministerios importantísimos. Dos instituciones: la salud, la CCSS. La Caja Costarricense no es una república independiente. Tenemos a mucha gente clamando por atención de salud de calidad y pronta. Se nos está muriendo la gente en estas listas de espera desgraciadamente. Eso hoy es una realidad. Con una institución insignia en Latinoamérica y en el mundo yo creo que es un lujo que no nos podemos dar. Otra institución; el ICE, una empresa que ha logrado posicionarse a nivel mundial. En donde los 
ingenieros del ICE gestores de proyectos importantes están dando hoy en foros internacionales cátedra de cómo es que se tiene una matriz limpia. Porque recordemos que hay países como Alemania, como otros países que hoy están incursionando en eólico, solar, pero su matriz es térmica. Qué es lo que hacen, cuando sopla el viento a esto se le baja la velocidad, pero cuando deja de hacer viento hay que volver a apretar las plantas térmicas. Costa Rica no. Costa Rica tiene una matriz hidro, una matriz limpia. La energía eléctrica que nosotros tenemos hoy es limpia, es verde. Entonces es importante que una institución como esta siga desarrollando y aportando al desarrollo de este país.
Dos ministerios; el Ministerio de Educación. Ahí tenemos el 9% casi el 8% del presupuesto nacional, pasa por la Universidades públicas también. Ahí podemos trabajar en la formación, tenemos que trabajar infraestructura, tenemos que trabajar en formar al costarricense comprometido con esta sociedad. ¿A dónde más? Ahí está poniéndose la plata. Y la última institución fundamental para poder darle progreso a este país; el MOPT. La infraestructura de este país está ahí, ahí están los caminos, ahí están los puentes, la coordinación con las municipalidades, coordinación con asociaciones de desarrollo y con otra asociatividades que están a lo largo y ancho y además coordinación directa con empresa privada que quiere emprender, que quiere desarrollar. Necesitamos acceso, pero acceso de calidad a todos los lugares de este país y con una responsabilidad ambiental absoluta. Entonces, qué quiero decir con esto; salud, educación, infraestructura y energía. Pilares fundamentales del desarrollo de un país como este. Y sobre esto nos tenemos que montar para que estos 4 vagones del progreso y el desarrollo de este país caminen y los demás vagones que son todas las demás instituciones que están detrás las enganchemos y las arrastremos.
¿Cree que a partir de este proceso electoral, el partido ya entra en un proceso de maduración? ¿Ya podemos hablar de un nuevo Frente Amplio o de un Frente Amplio consolidado y qué tiene que cambiar en el partido para llegar a ese punto ideal de madurez?
Yo creo que no hace falta un FA nuevo, ya tenemos un FA. Lo estamos construyendo, lo estamos armando. Tenemos que darle cariño, tenemos que solidarizarnos con el proyecto. Tenemos que apuntar a mejores ideas y mejores propuestas para poder hacer que el partido se fortalezca. Qué hacemos con pensar o decir en un discurso vamos por un FA nuevo. Bueno ¿Y el FA que teníamos qué pasó? Yo creo que en eso tenemos que ser absolutamente consecuentes. Ya tenemos un FA. Este FA hay que fortalecerlo, este FA tenemos que entre todos hombres y mujeres aportarle para que se vaya fortaleciendo y para que abra espacios a los que nos hemos comprometido. Nos hemos comprometido con sectores ambientales, con los sectores de trabajadores y trabajadoras de este país, a defender la institucionalidad. Nos hemos comprometido con los sectores diversos, nos hemos comprometido con las mujeres, nos hemos comprometido con los jóvenes. Nos hemos comprometido con muchos sectores que tienen que ver con el desarrollo socioeconómico de este país que en otros grupos no encuentran espacio. Y el FA lo está abriendo, pero tenemos que tener cuidado de que aquí tiene que haber homogeneidad para que todos tengamos la misma posibilidad de participar.
Nacen nuevos partidos de temas progresistas en CR. ¿Por qué no podemos estar bajo una misma bandera?
Porque la izquierda en este país se basa en ideales y la derecha se basa en lo económico. Es muy fácil ponernos de acuerdo cuando ponemos 100 pesos en la mesa, 50 son tuyos y 50 son míos. Haga usted lo que quiera con sus 50 y yo con los míos y los dos contentos. Cuando estamos hablando de ideales, estamos hablando de personas, estamos hablando de proyectos, estamos hablando de inquietudes, estamos hablando de querer desarrollar sueños. Lo que tal vez no hemos tenido es capacidad de aterrizar esos sueños, de aterrizar esos ideales desde la izquierda costarricense. Eso es una responsabilidad que tiene el FA, saber tomar lo mejor de esos ideales, de estos sueños, de estas ideas, de estas propuestas y tratar de amalgamarlas lo mejor que se pueda para que el proyecto político se fortalezca y se vuelva más creíble, más accesible a todos. Es cuando te hablo de homogeneizar. Y eso es lo bonito de la izquierda, lo que nos hace a nosotros decirnos que somos de izquierda es que no somos domesticados, es que no somos personas que estamos adoctrinadas por el material, que no estamos adoctrinadas por el metal, que no estamos adoctrinados por lo económico. ¿Qué es fundamental para desarrollar a los pueblos la parte económica? Sí, pero de una manera plural, no como se da en este momento en el país que estamos presentando niveles de crecimiento económicos importantes pero todos sabemos a dónde se está yendo todo ese desarrollo económico. ¿A los bolsillos de quiénes? De la banca, de los sectores económicamente más poderosos, de los que económicamente están manejando los grandes negocios de este país. Mientras tanto, ¿el pueblo con qué se queda? Con las migajas. ¿Cuáles son esas migajas? Los sueldos mal pagados que es lo único que está cayendo abajo a cuenta gotas. ¿Y nuestro ideal cuál es? Que haya más igualdad. Ese es nuestro ideal y que haya felicidad para todos.
Refiérase más a la responsabilidad del Frente Amplio.
La responsabilidad nuestra es muy concreta. Nosotros tenemos que ser radicales contra la corrupción, contra la robadera, contra la explotación de los trabajadores y las trabajadoras, contra el mal manejo del medio ambiente. Son temas específicos sobre los que tenemos que ser radicales. El problema es que a veces tendemos a radicalizarlo todo, inclusive en la relaciones humanas, y creemos que si soy de izquierda no puedo hablar con Fulano y no puedo hablar con Mengano y no puedo hablar con Sutanejo. O sea tenemos que tener en ese sentido la mente más amplia y saber que si queremos lograr cosas en este país para hacer socialismo a la tica, como lo pregonaba Manuel Mora Valverde, es hablando con todo el mundo.
Tenemos que relacionarnos porque si vos no sabés cómo piensa tu enemigo entonces ¿cómo vas a contrarrestar con una propuesta lo que él intencionalmente quiere hacer? Y a veces el problema es que nos radicalizamos hasta en eso, en la relaciones humanas, en las relaciones inter partidarias. Desde la izquierda tenemos que saber negociar con la derecha. Hay que saber negociar. ¿Para qué? Para beneficiar a nuestros sectores que son los más necesitados porque si no ellos se van a radicalizar más y si ellos se radicalizan, diay son los dueños del capital ¿Y entonces nosotros qué nos queda? De nuevo otra vez repartir miseria, repartir pobreza porque nos radicalizamos en todo.
Última pregunta. Hay un 30 o 40% de la sociedad electoralmente activa que no tiene por quién votar, que no tiene afiliación partidaria pero que está buscando por quién votar. Una gran parte de ese 30-40 por ciento son personas entre los 18 y 35 años y las encuestas dicen que una gran parte de ellos tienen ideales progresistas. ¿Qué tiene que hacer el FA específicamente en lo electoral para que esa gente que está buscando por quién votar diga amarillo y negro?
Nosotros tenemos un nombre como partido que tiene que llamar a amalgamar, a unir, que tiene que llamar e invitar a todo ese electorado joven que está indeciso. Nos llamamos el Frente Amplio. Como partido Frente Amplio nosotros tenemos precisamente que demostrarle a toda esta gran masa electoral de jóvenes que aquí tienen una opción, que aquí tienen una posibilidad para que puedan venir a exponer sus ideas y sus propuestas. Que van a ser escuchadas, que van a ser tomadas en cuenta, que somos negociadores, que somos personas que estamos por el progreso del país y que nos preocupamos por que hoy tengan trabajo y que mañana puedan tener una pensión justa. Que este es el partido que no está pensando sólo en el hoy, que está pensando en el mañana, que está pensando en los hijos que ellos en algún momento van a traer. Eso es lo que nosotros tenemos como responsables de un partido político que se hace llamar Frente Amplio. Amplitud. Tenemos que hacer que toda esta gente tenga confianza de que aquí hay gente honesta, gente que no les va a engañar con un discurso lleno de mentiras, con un discurso demagógico que lo único que pretende es abordarlos y robarles el voto. Hoy es políticamente el don más preciado los costarricenses, el voto. Ellos tienen que entender que ese tesoro lo pueden depositar solamente en un banco que sea absolutamente seguro de que lo va a resguardar y lo va a cuidar para las futuras generaciones.
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Lea la entrevista a Edgardo Araya
