La Comisión Política del Frente Amplio condena la persecución de figuras opositoras y críticas al gobierno de Daniel Ortega, con base en una ley, de supuesta seguridad nacional, aprobada en diciembre de 2020 que profundiza el hostigamiento y el acoso en contra de medios de comunicación, figuras opositoras de distintas banderas políticas, activistas sociales, colectivos feministas y de derechos de las personas sexualmente diversas, entre otros.
Una vez más, rechazamos la estrategia de judicializar la política en el marco de procesos electorales como recurso para prescindir de la oposición, herramienta que ha sido utilizada de manera sistemática por los sectores más autoritarios del continente.
La censura, las formas autoritarias de acallamiento de las voces disidentes y la pretensión de que la fuerza pesa más que las ideas del debate en el marco de un proceso electoral, distan mucho de los valores que el Frente Amplio comparte en la aspiración de construir un mundo verdaderamente justo y libre.
Sin desconocer la histórica intervención y presión extranjera sobre Nicaragua y la región, rechazamos los discursos simplistas y reduccionistas, que califican a cualquier persona crítica del gobierno de Ortega de ser agente desestabilizador pagado por intereses foráneos, práctica que lesiona y deslegitima los auténticos y justos reclamos de no intervencionismo y soberanía para los pueblos latinoamericanos.
Al pueblo nicaragüense, una vez más, le expresamos nuestras más sinceras muestras de apoyo y solidaridad, estos delicados momentos.