POR OTRA COSTA RICA POSIBLE:
UNA PLATAFORMA DE LUCHA URGENTE Y NECESARIA PARA AVANZAR
Conscientes de la gravedad de la crisis que vive el país y de la necesidad de enfrentar sus negativas consecuencias sobre los derechos de nuestro pueblo, las delegadas y delegados al Primer Congreso del Frente Amplio, hacemos un llamamiento al pueblo de Costa Rica y a las fuerzas sociales y políticas progresistas, para que juntos levantemos un frente de lucha en defensa del bien común, por un país en el que quepamos todas y todas, naturaleza incluida.
Frente al crecimiento de la desigualdad, de la pobreza y del desempleo
Una política de protección de los salarios, especialmente de los salarios mínimos, como lo propone el proyecto de ley presentado por el Frente Amplio en el parlamento, con el respaldo de organizaciones sociales; acompañada de una política de creación de empleo decente, como lo ha propuesto el movimiento sindical. Los derechos laborales en el sector público y en el privado deben ser respetados.
Hay que luchar por verdaderos programas que garanticen vivienda digna. Promover convergencias alrededor de propuestas presentadas antes el parlamento y ante la sociedad de carácter social, fiscal, precios de canasta básica, tarifas y calidad de servicios públicos, pensiones. Decenas de miles de trabajadores y trabajadoras viven sin derechos en las fábricas, en las plantaciones, en los comercios y oficinas.
Rechazamos de plano las propuestas fiscales del gobierno por regresivas e insolidarias, y llamamos a luchar por las propuestas de justicia tributaria planteadas desde el Frente Amplio y el campo popular, que garantizarían frenar radicalmente la evasión y poner a pagar a los que pueden y deben: las grandes empresas, los banqueros privados, las transacciones financieras especulativas, los millonarios que eluden impuestos escondiendo su riqueza en el exterior.
Frente a la agresión contra la Caja, los seguros sociales y las pensiones solidarias
Apoyamos constituir urgentemente un frente nacional por la defensa, el fortalecimiento y la refundación de la Caja Costarricense del Seguro Social. También es urgente defender y revitalizar el régimen de pensiones de Invalidez, Vejez y Muerte(IVM).
En el Frente Amplio, como entre la mayoría de nuestro pueblo, no estamos dispuestos a permitir que se consume el debilitamiento sistemático y la destrucción de la Caja. Tampoco permitiremos que se acabe impunemente con el seguro social y solidario de riesgos del trabajo. Las Garantías Sociales las conquistó nuestro pueblo con sangre, y las vamos a defender en todos los terrenos de lucha.
Frente al deterioro y a los ataques contra la educación pública
Debemos luchar por el mejoramiento de la calidad y cobertura de la educación pública en todos sus niveles. Reducir la brecha entre la educación pública y privada. Fortalecer el sentido crítico, la participación cívica, la ética ambiental, la igualdad de género, el respeto hacia lo diverso, la solidaridad. Defender la dignidad y las condiciones de trabajo de estudiantes y docentes. Luchar por que se haga efectivo el crecimiento constante del presupuesto para educación.
Frente a la radicalización neoliberal con el TLC
La institucionalidad democrática del Estado social está cada vez más deteriorada y amenazada. Hay que estimular el surgimiento de frentes de lucha unitarios alrededor de la defensa de la salud y de la educación públicas, del ICE, del INS, del INA, de JAPDEVA, del CNP, del patrimonio ambiental, cultural e intelectual.
Frente a la depredación ambiental
Pasar a la ofensiva en la defensa de otro desarrollo posible sin destrucción, entrega o privatización de nuestros recursos, es otra tarea urgente del movimiento progresista y patriótico del país. Desde el Frente Amplio ratificamos nuestro compromiso ecológico , en confrontación directa con los depredadores, y en diálogo constructivo y pedagógico con los sectores populares que no ven posible o no entienden otro modelo de relación con la naturaleza.
Apoyamos a los frentes unitarios de lucha en contra de la minería, de manera inmediata en Crucitas y en Miramar. En defensa del agua, para declarar su acceso como derecho humano, garantizar su abastecimiento a las poblaciones como prioridad sobre cualquier otro uso del recurso y declararlo como un bien público, al servicio de la colectividad, que no puede ser privatizado, tal como lo propone la reforma constitucional presentada por el Frente Amplio.
Frente a la ofensiva privatizadora de las telecomunicaciones y de la energía
El modelo de apertura de las telecomunicaciones que se está imponiendo es completamente ruinoso para el ICE. El país, por medio del ICE, tendría que subsidiar a Slim y a la Telefónica española o a las transnacionales estadounidenses que ingresen al mercado nacional de las telecomunicaciones. Un bien público levantado con las inversiones que ha hecho el país durante 50 años, sería entregado a intereses extranjeros.
Si muy grave es lo que está sucediendo en la industria de telecomunicaciones, más preocupante es todavía lo que se trama con la industria energética.El proyecto de electricidad que se discute en la Asamblea Legislativa, de prosperar supondría el desmembramiento del modelo eléctrico que ha funcionado bien en Costa Rica. Trasladar al sector privado una actividad estratégica como la electricidad, con fines de lucro, sería un error histórico que debemos impedir.
La defensa y la refundación de una institución clave en el desarrollo nacional, como el ICE, es fundamental. Las telecomunicaciones públicas deben ser defendidas, el proyecto de electricidad de los neoliberales debe ser archivado.
Frente a la corrupción de las Concesiones
El gobierno y el conjunto de la derecha política, empresarial y mediática, tratan de desviar la atención del país sobre la corrupción y el entreguismo que envuelve el proceso de concesión de los servicios públicos bajo responsabilidad del Estado.
El Frente Amplio fue el único partido que presentó una oposición firme y fundamentada a la nefasta ley de concesión de obra pública, y seguimos siendo el partido que no sólo saca a la luz los trapos sucios, sino que reivindica también la derogación de esa ley y el regreso del Estado al cumplimiento de sus deberes constitucionales.
La concesión de carreteras, aeropuertos, muelles, revisión vehicular, seguros, telecomunicaciones, energía, salud, educación y otros servicios, se ha convertido en el instrumento privatizador por excelencia. Combatir esta política es necesario para parar la hemorragia del ahorro nacional y de los bienes públicos hacia el lucro.
Frente al crecimiento de la violencia y de la inseguridad
En una Costa Rica cada día más desigual y menos democrática, el imparable crecimiento de la violencia en nuestra sociedad es una epidemia que amenaza la vigencia de los derechos humanos y de la paz.
Es absolutamente intolerable la violencia que sufren cotidianamente las mujeres, la infancia, la juventud, la tercera edad, los pueblos indígenas, la diversidad sexual y de género, la población afrodescendiente, los pobres.
Debemos promover permanentemente campañas de denuncia contra la violencia, que se conviertan en una nueva pedagogía para revitalizar la cultura del respeto, de la convivencia democrática y de la paz.
Al fomento de ese clima de violencia y descomposición de los valores de la convivencia y del respeto a los derechos humanos, no es ajeno el crecimiento de la delincuencia en diversos órdenes. Desde la corrupción política y el crimen organizado que penetra hasta altos estamentos del Estado, como lo hemos visto con el constante asalto al erario, con la penetración de los cárteles del narcotráfico, hasta la delincuencia cotidiana que sufren en las calles y en sus hogares los ciudadanos y ciudadanas. Es urgente una política de seguridad ciudadana democrática, que el Frente Amplio defiende y ayuda a construir junto a toda la gente que se siente amenazada e indignada.
Es necesario oponerse a quienes fomentan la militarización del país y criminalizan la protesta social, con el objetivo de reprimir las luchas de nuestro pueblo contra la injusticia y contra la corrupción.
Frente a la intolerancia , la discriminación y la exclusión
Hay que luchar para superar todas las formas de violencia, opresión y discriminación contra las mujeres. Fortalecer legislación y políticas públicas que garanticen igualdad real en materia política, laboral, profesional, salarial.
Debemos promover programas que promuevan cambios culturales con el fin de superar los lastres del patriarcado y del machismo.
Incorporación inmediata a la legislación nacional de los compromisos internacionales establecidos por las Naciones Unidas, en materia de derechos a la salud sexual y reproductiva.
Luchar por la defensa de todas las personas a vivir su vida de la forma más digna, y por el respeto a la diversidad.
Fortalecimiento de programas a la promoción y defensa de los derechos de nuestra infancia y de nuestra juventud.
Respeto a los derechos de nuestros pueblos originarios. Inmediata aprobación de la Ley de Autonomía de los Pueblos Indígenas.
Frente a la crisis económica y alimentaria en curso
Desde el Frente Amplio decimos que sí hay alternativa al recetario que pretenden seguir imponiendo los neoliberales.
Insistim y luchamos por que el sistema tributario sea justo: los que tienen más deben pagar más de acuerdo a sus posibilidades reales, equitativo, eficaz, transparente, progresivo y democrático..
También se necesita otra política económica y social que aliente los derechos económicos y sociales de los sectores populares. El gasto público debe aumentar en inversión en proyectos de infraestructura vial, portuaria y energética; gastar en la construcción y mejoramiento de escuelas, colegios, centros de salud; inducir el gasto en desarrollo tecnológico e innovación, proyectos que protejan el medio ambiente y la biodiversidad, estimulen la cultura y la pongan al alcance de la población.
Costa Rica sufre hoy de una inseguridad alimentaria, cuyos únicos culpables han sido los gobiernos neoliberales de los últimos años.
De manera inmediata debemos luchar la reactivación y el fortalecimiento del Consejo Nacional de Producción. Debe garantizarse una canasta básica alimentaria con precios regulados. Deben reforzarse los programas nutricionales y de protección social, en defensa de nuestra infancia y de los sectores más desprotegidos y vulnerables de nuestro pueblo. Es necesario movilizarnos para exigir al gobierno políticas soberanas en defensa de la agricultura y de la pesca nacional.
Frente a las amenazas a nuestra democracia
La democracia costarricense está en retroceso.
La corrupción crece aceleradamente.
Hemos pasado de una sociedad política a una sociedad de mercado, que no impulsa ningún ideal político, sino que se mueve únicamente por el poder y por la ganancia. La derecha neoliberal en el poder es directamente responsable de este asalto a la democracia, de su debilitamiento y descomposición, de la corrupción galopante.
La legislación electoral sigue permitiendo que el poder del dinero mutile y aplaste la voluntad democrática de la ciudadanía, y continúa supeditada a los intereses y maniobras del poder político tradicional. Promover reformas profundas del sistema político para que pueda canalizar las demandas y aspiraciones populares, así como la transformación democrática del régimen electoral, son tareas urgentes para salvar a nuestra democracia de quienes la tienen secuestrada y saqueada.
Tanto en el ejercicio de los derechos democráticos en general, como en las contiendas electorales en particular, prevalece una de tiranía mediática que impide el derecho del pueblo a la libertad de expresión y a la información. El derecho a la comunicación y a la información como un derecho humano fundamental es gravemente violado en nuestro país, y deben constituirse en reivindicaciones prioritarias de las fuerzas progresistas.
Alrededor de cada lucha el Frente Amplio debe animar campañas de organización y movilización de la protesta, que encuentren concreción en las condiciones de cada territorio. Debemos aprender a construir la defensa del territorio: condiciones de vida, de trabajo, recursos, producción, servicios públicos, cultura, participación democrática, en el marco de un plan nacional de lucha que se alimente de las situaciones concretas que se viven en las distintas regiones y localidades del país.
En ese sentido el Congreso del Frente Amplio respalda las luchas de las fuerzas vivas de Guanacaste, Puntarenas y Limón, que reclaman la inmediata aprobación de la Ley de Territorios Costeros Comunitarios; la recuperación de la Zona Marítimo Terrestre para que no siga su entrega a intereses extranjeros ; la defensa del agua, de los recursos marinos y pesqueros; la defensa y modernización de JAPDEVA; los derechos ambientales y laborales del pueblo trabajador frente a los desmanes de la expansión piñera, bananera y de otros productos de exportación; el fin al saqueo de recursos estratégicos que ha convertido a estas provincias en las regiones más pobres del país.
El Congreso del Frente Amplio llama a todos los sectores populares a construir con el aporte de todos y todas, un plan de lucha unitario, de articulación y de movilización de cara al próximo Primero de Mayo, para convertir esta fiesta de las y los trabajadores en una vigorosa jornada de movilización, que abra un nuevo ciclo de rebelión democrática y de esperanza por los derechos del pueblo y por otra Costa Rica posible.
Resolución del Primer Congreso del Frente Amplio
San José, Costa Rica, 10 de abril de 2011