La diputada Patricia Mora solicitó al Presidente Luis Guillermo Solís la destitución de Alberto Raven Odio de la Junta Directiva del Banco de Costa Rica, dado que está siendo investigado en el Ministerio Público (expediente 17-48-1218-PE) por una denuncia de tráfico de influencias.
La cementera Holcim construyó en San Carlos la planta hidroeléctrica “Aguas Zarcas”, por la cual ha tenido un enfrentamiento judicial con Tico Frut (una de las principales productoras y exportadoras de naranja y piña), por el aprovechamiento del caudal hidráulico del proyecto.
En el año 2014, Holcim vendió la planta a Coopelesca. La compra se hizo a través de dos préstamos, uno del BCR por $32,7millones y otro de INFOCOOP por el costo faltante para los $35,3 millones. El bufete que realizó la transacción de la compra es Zürcher Raven Odio. El señor Alberto Raven Odio era en ese momento el fiscal de Holcim así como Directivo del BCR y socio del bufete Zürcher Raven Odio.
Para Patricia Mora “la gravedad de esta denuncia contra el señor Raven Odio versa en que pone en riesgo a las finanzas públicas del país. El BCR es un banco público y esta no es la primera ocasión en que sus directivos son señalados e investigados por irregularidades, tenemos el caso del préstamo a la Cementera SINOCEM que está en investigación en la Comisión de Control de Ingreso y Gasto Público, así también encontramos al señor Raven Odio cuestionado por la vinculación con 62 sociedades que aparecen en los Papeles de Panamá”.
La investigación de los Papeles de Panamá, nos informa que el señor Raven Odio fue secretario de Tico Frut en el año 2014, y que mediante su labor de abogado, construyó un entramado de al menos 7 sociedad offshore para sostener la empresa de su tío Carlos Odio Soto, siendo objeto de sospechas por posible elusión o evasión fiscal.
Según la diputada Mora “no puede ser que se utilicen cargos públicos para generar beneficios personales. Estas denuncias requieren acciones contundentes por ello, le solicito al Presidente Luis Guillermo Solís, la destitución del señor Alberto Raven Odio de la Junta Directiva del Banco de Costa Rica, como un acto ético que garantice la transparencia de estas investigaciones y se ejerza justicia a favor del bien común”.