Desde hace una semana, miles de costarricenses se han venido manifestando a lo largo y ancho del país en caravana vehicular de relevos, para conmemorar los festejos patrios del 15 de setiembre de 2020. Siguiendo los protocolos de la crisis sanitaria, los y las costarricenses buscan ser escuchados, clamando a una sola voz: Costa Rica no se vende, la patria se defiende.
Y es que hoy, al igual que en 1821 y en 1856, las amenazas de entregar la patria no se han terminado. Bajo el argumento de sacarnos de la crisis económica y de convertirnos en un país desarrollado, nos engañan diciendo que la única manera de lograrlo es vendiendo los activos más rentables de Estado: la telefonía celular, el INS, la fábrica de licores (que produce alcohol, tan necesario ante emergencia sanitaria) , la privatización de algunos servicios de salud y la educación superior: Mientras tanto, mantienen las injustas medidas tributarias como el 13 % IVA y los grandes evasores siguen declarando cero ganancias.
Desde el Frente Amplio saludamos este nuevo esfuerzo de lucha unificada, convocada ahora por el Movimiento Unitario Sindical y Social, apoyado por organizaciones sociales en distintas partes del territorio nacional , una forma de lucha adecuada a los tiempos de pandemia, donde buscamos hacer realidad las estrofas : “Sepamos ser libres no siervos menguados, derechos sagrados la Patria nos da”.